RELATO DEL VIAJE A
ZARAGOZA
MAYO 2013
El fin de semana del 25 y 26 de
mayo, un grupo de socios de la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Bilbao
viajó a Zaragoza con intención de pasar un bonito fin de semana disfrutando de
los recursos ferroviarios más importantes de la ciudad.
El sábado día 25 de mayo tuvimos
que madrugar bastante (algunos nos levantamos a las 3 de la mañana…) para ir a
Abando a coger el Alvia que nos llevaría hacia la ciudad maña. El madrugón y el
cansancio merecieron la pena, ya que nada más subir al tren empezaron las
risas.
En estas fotografías se pueden
ver a algunos integrantes de la zona golfa del tren disfrutando del viaje.
Al llegar a la estación de
Castejón de Ebro, en Navarra, tuvimos la oportunidad de descender del tren para
sacar algunas fotografías.
En esta imagen se puede ver el
Alvia que después nos trasladaría a Zaragoza junto a algunos socios dispuestos
a realizar fotografías a un mercante que se acercaba.
También pudimos disfrutar del
Platanito, un prototipo de la Serie 443 que ha tenido una historia bastante
peculiar y desdichada, habiendo terminado apartado en esta estación de la
Ribera Navarra.
Tras un divertidísimo viaje en
tren siguiendo el curso del río Ebro, por fin llegamos a Zaragoza, donde nos esperarían
muchas más aventuras.
Lo primero que visitamos fue el
tranvía de la ciudad.
Pudimos conocer in situ el nuevo
tramo en el que el tranvía circula sin catenaria.
Foto: Iñaki López.
Este fue uno de los momentos en
los que inmortalizamos nuestra presencia en la ciudad a través de una foto de grupo
de todos los participantes en una de las estaciones del tranvía.
Aquí salimos los más frikis del
grupo con nuestro aparato favorito entre las manos (una cámara de fotos) y en
nuestro lugar ideal: una estación de tren. Concretamente, en esta ocasión nos
encontrábamos en la estación de Goya.
Autor: Ángel Cáceres.
Y despúes, la tan esperada
comida…
En esta fotografía salgo
maravillosamente bien acompañada por dos de los integrantes más veteranos de la
asociación. Además, en esta estampa están representadas tres generaciones: los
tuenti, los cuarenti, y los cincuenti.
Por la tarde realizamos una
excursión a Cariñena en un tren Intercity MD que hacía el recorrido Huesca –
Valencia, con el objetivo de visitar el Centro de Interpretación del
Ferrocarril de la Comarca Campo de Cariñena, recientemente inaugurado. En la
visita, además de conocer una gran cantidad de objetos y útiles ferroviarios de
la línea Central de Aragón, pudimos admirar un vagón fudre cerrado realizado en
madera con cuba interior, que ha sido restaurado para su exposición en el
museo. No hay que olvidar que esta comarca es muy conocida por sus vinos, y el
ferrocarril siempre ha estado muy ligado a la viticultura, utilizándose para
exportar el vino que se producía en estas tierras.
Vista general del centro de
interpretación, situado en un muelle de mercancías de los años 20 del siglo
pasado.
Foto de grupo de los asistentes a
la visita de Cariñena.
TRD realizando un servicio
Zaragoza – Teruel a su paso por la estación de Cariñena, en pleno ocaso,
mientras observaba y recogía por los raíles los últimos rayos del sol de este
maravilloso día.
Este es el Intercity que nos
llevaría de vuelta a Zaragoza para así, dar por finalizada una intensa jornada
friki – ferroviaria.
El domingo 26 de mayo comenzamos
el día visitando el Centro de Control y Regulación que controla la línea de
alta velocidad Madrid – Zaragoza – Barcelona – Figueras. Sus instalaciones y
dependencias se encuentran situadas en el edificio de la antigua estación de
Zaragoza – Delicias.
En esta fotografía podemos ver la
estación antigua y la actual.
Después pusimos rumbo a Casetas,
donde la Asociación Zaragozana de Amigos del Ferrocarril y Tranvías tiene
preservado su material histórico. Aquí, además de poder conocer el local de la
asociación, pudimos deleitarnos con su material móvil: recorrimos el interior
de algunos de los coches, entramos en las cabinas de las máquinas que tienen
preservadas, etc.
Estación de Casetas.
Material preservado por la
Asociación Zaragozana.
Momentos antes de coger el tren
de vuelta a Bilbao, tuvimos por primera vez un momento de relax para sentarnos
y seguir hablando de esta maravillosa afición que marca el curso de nuestras
vidas.
Para poder sobrevivir a un fin de
semana tan intenso, es importante coger energías comiendo patatas en la
cafetería del Alvia.
Próxima parada… Bilbao.
Tras un inolvidable e irrepetible
fin de semana, y tras estar casi 66 horas despiertos (no todos…), llegamos a
nuestro destino final. Aunque en la fotografía no estamos todos los que fuimos,
si fuimos todos los que estamos. Se trata de una emotiva foto de grupo que nos
hicimos al llegar a la estación de Abando en Bilbao.
Ahora, solo nos queda echar la
vista atrás para recordar el viaje admirando las fotografías, recordando los
momentos vividos, reírnos de las anécdotas, y soñar con que pronto llegue el siguiente
viaje…
Eskerrik asko a los organizadores
del viaje y como no, a los asistentes, compañeros de viajes y anécdotas, porque
sin vosotros nada de esto hubiese sido posible.
Hasta la próxima.